El estereotáxico es una técnica que se utiliza en neurocirugía para llegar a zonas del cerebro con precisión. Permite definir la posición de una estructura gracias a un sistema de coordenadas 3D en el espacio y llegar a ella para realizar un tratamiento, una biopsia , etc. El método garantiza una mayor precisión y, al mismo tiempo, es menos invasivo que una intervención convencional: solo se dirige a células enfermas o tóxicas.
Primero definimos un espacio de referencia. Para ello, se fija un sistema de sujeción: la cabeza del paciente se fija firmemente en el marco, y se moldea una "red" de plástico termoformable en la cara, y se sujeta mediante lazos laterales). Este posicionamiento firme permite que se reproduzca exactamente durante cada sesión. A continuación, se utilizan medios de imágenes médicas ( resonancia magnética , tomografía computarizada , radiografía , etc. ) para deducir un sistema de coordenadas 3D relacionado con el marco y obtener las posiciones muy precisas de los objetivos en este nuevo marco de referencia.
La información obtenida se registra en el dispositivo computarizado y permite al equipo definir con precisión las posiciones de las áreas que serán objetivo y determinar las máscaras. Una sesión "vacía" le permite refinar la configuración controlando cuidadosamente la orientación y la dosis de los rayos.
La precisión de la focalización varía según el sistema y la profundidad de la zona a alcanzar, puede ser del orden de un milímetro.
La cirugía estereotáxica está indicada para:
También se utiliza en la investigación de la neurociencia (por ejemplo, la eliminación del hipocampo en animales sin dañar las estructuras adyacentes).